Al volante pueden surgir situaciones que amenazan nuestra seguridad. Los fenómenos meteorológicos se encuentran entre ellas, siendo el viento un fenómeno impredecible que hay que tener en cuenta.
Cuando hablamos de un viento racheado, suele venir acompañado de ráfagas muy fuertes que con toda probabilidad, van a desestabilizar nuestro vehículo y a alterar la trayectoria marcada.
Tanto es así, que los fuertes vientos pueden provocar el cambio trayectoria repentina del vehículo, así como reducir la tracción y el agarre de las ruedas al asfalto o incluso llegar a volcar un vehículo.
Para prevenir estas situaciones y estar preparados ante esta contingencia, vamos a detallar algunos consejos para conducir con viento fuerte sin perjudicar nuestra seguridad.
DIRECCIÓN DEL VIENTO
Fijarte en el movimiento de los árboles, las mangas de viento colocadas en la carretera o incluso nubes de polvo… .
Todo esto puede aportarnos pistas de la dirección en la que éste sopla.
Saber en qué dirección sopla el viento es fundamental para controlar la desestabilización del mismo:
- Si el vehículo aumenta su velocidad, significa que el viento sopla desde la parte trasera impulsándolo.
- Con el viento de frente, nos cuesta mantener la velocidad fijada.
- Si notas que el coche sufre movimientos bruscos, el viento sopla desde un lateral.
Pero el viento también puede circular por los bajos del vehículo, elevándolo levemente y reduciendo el agarre de las ruedas en el asfalto, si la velocidad a la que circulamos es demasiado elevada.
En AEMET puedes obtener la predicción meteorológica por horas y días para estar preparados ante posibles fenómenos meteorológicos adversos.
REDUCIR LA VELOCIDAD Y AUMENTAR LA DISTANCIA DE SEGURIDAD.
Cuando notemos que el vehículo se desestabiliza llegando a perder su trayectoria, la DGT recomienda reducir la velocidad y utilizar marchas cortas.
Reduciendo la velocidad, reducimos las consecuencias del viento, ya que controlaremos mejor el vehículo evitando que éste pierda agarre con el asfalto.
SUJETAR FIRMEMENTE EL VOLANTE
Con vientos racheados, la dirección del vehículo se ve comprometida.
Es imprescindible llevar ambas manos sujetando firmemente el volante para evitar salirnos del carril por el que circulamos.
CIRCULAR POR EL CENTRO DEL CARRIL
Circulando por el centro del carril evitas invadir el carril contrario o salirte a la cuneta con ráfagas de viento.
CAMIONES Y VIENTO
Camiones en la carretera y viento forman un tándem peligroso.
Los camiones actúan como pantalla del viento lateral haciendo que se pierda ligeramente el control de la dirección del coche, tanto al entrar como al salir de esta protección.
Para evitarlo, agarra firmemente el volante y reduce la velocidad realizando movimientos cortos del volante que nos permitirán retomar la trayectoria correcta.
CIRCULAR CON REMOLQUES CUANDO HAY VIENTO
Siempre hay que circular con mucha precaución, pero si llevas un remolque bajo, debes extremarlas aún más.
El viento racheado, puede jugarnos malas pasadas haciéndonos “la tijera”. Reduce la velocidad hasta que podamos controlar el remolque.
Si se trata de un remolque voluminoso y ligero, tal vez sea mejor posponer el viaje hasta que las condiciones sean más favorables.
A mayor superficie del remolque, los efectos del viento aumentan exponencialmente.
Lo mejor es realizar un adelantamiento procurando separarnos lo máximo posible de este tipo de vehículos.
Si tu vehículo tiene baca, ya sabes que ofrece más resistencia debido a que afectamos la aerodinámica del vehículo. Este efecto, será aún mayor con el viento.
ATENCIÓN A POSIBLES OBJETOS EN LA CARRETERA
Con situaciones de viento, es habitual ver por la carretera diversos objetos rodando como por ejemplo bolsas de plástico, papeles, envoltorios… .
Estos objetos, pueden ponerse en nuestro camino llegando a entorpecer la visibilidad.
Si el conducir en circunstancias normales ya requiere de toda atención, ante situaciones adversas, no podemos perder la concentración.
Por si todo esto fuera poco, el no tener el vehículo con sus revisiones al día, tal y como indicábamos aquí puede agravar aún más si cabe, esta situación.
