A partir del mes de Julio todos los vehículos de nueva homologación deberán incorporar obligatoriamente el Detector de Fatiga y Somnolencia.

Este no es el único sistema que deben incorporar obligatoriamente todos los coches de nueva homologación, sino que la Dirección General de Tráfico nos indica que serán ocho los sistemas de ayuda al conductor (ADAS).

Gracias a estos sistemas de ayuda a la conducción que se van implantando, el Parlamento Europeo persigue reducir a cero las muertes derivadas de accidentes en la Comunidad Europea de cara al 2050.

La monotonía en la carretera, las condiciones climatológicas o la falta de dificultad de la vía en la que nos encontremos circulando son factores que potencian el cansancio que puede sentir el conductor después de encontrarse muchas horas al volante.

El asistente Detector de Fatiga y Somnolencia tiene como objetivo ayudar a reducir los siniestros derivados por distracciones causadas por somnolencia, cansancio o falta de atención mediante una alerta acústica y visual.

Condiciones Externas

Las condiciones externas tales como circular por una vía con tráfico, pavimento mal conservado, condiciones climatológicas adversas, hacen más difícil la conducción y nos obligan a mantener el nivel de atención.

Otros factores

Otros factores los propicia el mismo conductor. No hacer los descansos adecuados tanto en número de veces como en el tiempo necesario de descanso, conlleva una disminución en la concentración.

También influye el estado tanto psicológico como físico del conductor.

Mediante este asistente, un sensor que está ubicado en el volante analiza los movimientos y la presión que el conductor ejerce sobre el mismo.

Si detecta movimientos bruscos al volante o cambios de presión en el mismo, el sistema emite una señal luminosa en el cuadro de la instrumentación para avisar al conductor que el tiempo establecido de conducción continua ha sido superado.

En aquellos sistemas tecnológicamente más avanzados, las facciones del conductor son monitorizadas de cara a detectar determinados movimientos de la cabeza y ojos.

Por todos es conocido que los reflejos del conductor se ven reducidos por el cansancio y la fatiga. Además la vista resulta comprometida al disminuir la claridad de la visión y al resecarse los ojos obligando a parpadear constantemente.

También el sentido del oído se ve afectado ante el cansancio de tal manera, que el tiempo de reacción del conductor se aumenta y los reflejos se ven reducidos, lo que conlleva un aumento significativo de las posibilidades de sufrir un accidente.

¿CÓMO AVISA EL SISTEMA AL CONDUCTOR?

Los nuevos sistemas instalados en los vehículos de nueva homologación, poco tienen en común con los primeros sistemas utilizados que eran muy básicos.

Consistían en un colgante con un pulsador colocado al cuello del conductor que se activaba si éste pulsaba con la barbilla el interruptor provocando, al activarse, una señal acústica que alertaba del riesgo de quedarse dormido.

En la actualidad, al conductor se le transmite de varias maneras:

En el cuadro de instrumentación se enciende una señal luminosa con una taza de café y si el vehículo posee display, le enviará un mensaje a través de éste.

¿CÓMO RECONOCE EL SISTEMA LA FATIGA DEL CONDUCTOR?

Mediante una cámara de reconocimiento facial y siguiendo una serie de patrones de movimiento, detecta un exceso de parpadeo o la desviación de la mirada, la posición de la cabeza y las expresiones de cansancio.

Además, es posible que el volante posea un detector que analice la presión que se ejerce sobre el mismo, un exceso de correcciones de la dirección del volante o incluso de movimientos bruscos o mediante la ausencia de movimiento al volante durante un tiempo determinado.

Estos movimientos se detectan mediante un sensor de ángulo del volante que analiza los micromovimientos que realizar el conductor durante la marcha.

Algunos vehículos están provistos de cámara delantera que lee las líneas de la carretera y lanza una señal acústica al conductor si se pisan más de lo debido.