Vacaciones, la palabra más deseada en 2022. La llegada del verano nos regala sol, descanso y un intenso movimiento de nuestros vehículos.
La DGT nos aconseja sobre la necesidad de un buen mantenimiento de nuestro coche para evitar sorpresas desagradables que puedan estropearnos las vacaciones.
De ahí la importancia de vigilar la salud de nuestro coche para tener un descanso cómodo y seguro.
Conocer las averías más frecuentes, nos ayudarán a que nuestras vacaciones no sufran un “pinchazo”. A continuación, repasamos los puntos calientes de tu vehículo y ponte manos a la obra.
BATERIA
No solo la batería de nuestro smartphone es importante. Aunque no nos avise, la batería de nuestro vehículo, puede dejarnos “tirados” en medio del asfalto en cualquier momento.
Haz una vigilancia activa y preventiva de la misma y recuerda que su vida útil es limitada.
NEUMATICOS
Sufriremos los excesos del calor, nada que no podamos solucionar con una cerveza bien fría.
Sin embargo, nuestros neumáticos, experimentarán el aumento de la temperatura del asfalto sin compasión.
Esto, unido a la pérdida de presión, puede ocasionar un gran deterioro, acompañado por los tan temidos pinchazos y reventones.
MOTOR
No solo nuestro corazón se acelera en verano, si no que el “corazón” de nuestro coche, el motor, también sufre.
El aumento y la intensidad de uso durante el verano, genera sobrecalentamientos más frecuentes que en otras épocas del año. Vigila los niveles de aceite y anticongelante para mantenerlo a buen ritmo.
El ALTERNADOR
Aquí nos encontramos con una pieza fundamental para producir la energía que precisa nuestro vehículo.
Este puede ser el punto de partida de cualquier avería de origen eléctrico. Cuando visitemos nuestro taller, nunca está demás que nos revisen el funcionamiento de este punto caliente.
MOTOR DE ARRANQUE
La “chispa de la vida” para nuestro coche también solicita nuestra atención.
Sin el motor de arranque nada puede comenzar a funcionar en nuestros vehículos tradicionales.
¿Cómo detectar fallos en su funcionamiento?
Podemos tener los primeros síntomas nada más girar la llave en el contacto. Si notamos dificultades al arrancar, es posible que el tiempo y el desgaste estén haciendo mella en él.
En definitiva, debemos concluir que la mayoría de las averías más frecuentes se pueden evitar, no solo este verano, sino también el resto del año.
La clave para no golpear nuestro presupuesto con averías imprevistas radica en llevar un adecuado mantenimiento.
Esto nos permitirá mantener una constante interacción con nuestro vehículo estando al tanto de sus puntos débiles.
Hábitos de conducción
También debemos incidir en el hecho de que nuestros hábitos de conducción también pueden afectar el estado del vehículo.
Como pasa con cualquier otra herramienta, un uso negligente puede ocasionar desgastes y defectos que de otra forma tardarían más en aparecer.
Los comportamientos de conducción no solo afectan a la seguridad, sino también a la vida útil de nuestro coche y de sus componentes.
La conducción inteligente nos puede aportar un enorme ahorro en combustible y podemos contribuir a reducir los incidentes y accidentes en nuestras carreteras.
A las averías más comunes tenemos que sumar otros sistemas importantes, como pueden ser, el sistema de iluminación, la dirección, o los frenos.
No esperemos a la ITV para detectar fallas que después nos puedan conducir a situaciones de peligro tanto para nosotros como para nuestra familia.
Prevención
Por eso, y para concluir, debemos tomar medidas prácticas antes de retomar de nuevo nuestro tan merecido descanso.
Muchas de las comprobaciones preventivas solamente nos llevarán unos pocos minutos, mientras que no hacerlas puede llevar al traste un número considerable de días por no disponer de nuestro vehículo.
Y lo que es peor, puede arruinar meses de planificación de nuestras tan ansiadas vacaciones.
Es importante que vigilemos también en manos de quién dejamos nuestro vehículo.
Utilicemos talleres acreditados y con garantía certificada. Debemos tener mucho cuidado con los talleres piratas que lejos de aumentar nuestra seguridad, la pueden reducir con malas praxis u ofertas de dudosa calidad.
Consultemos con profesionales ante cualquier género de duda y no sacrifiquemos nuestra seguridad en carretera.