GNV o gas natural vehicular es una alternativa al diésel y la gasolina, ya que se trata de una energía más limpia y con menos emisiones al medioambiente.

La experiencia es la misma que la de conducir un vehículo de combustión diésel o gasolina, pero las emisiones son más limpias y resulta más económico.

Gas Natural

En la búsqueda de ser respetuoso con el medioambiente, el gas natural presenta una buena alternativa al diésel y la gasolina.

El gas natural es un hidrocarburo de origen fósil, ya que se genera a partir de restos orgánicos y en el que predomina el metano aunque también está compuesto por propano o butano.

Por este motivo, al no tratarse de una energía renovable, tiene reservas finitas mientras que las energías renovables, proceden de una fuente difícilmente agotable como la energía solar o la eólica.

¿Dónde se origina el gas natural?

Se origina bajo tierra a una profundidad entre 1,5 y 4 kilómetros. Para llegar hasta él es necesaria la utilización de un brazo perforador. Cuando se llega hasta la bolsa de gas, éste asciende debido a la presión existente en dicho yacimiento.

Para usar este gas de , previamente hay que purificarlo eliminando los componentes de CO2 y nitrógeno y se eliminan los hidrocarburos como el nitrógeno. De esta manera podemos tener garantías de seguridad en su uso.

¿En qué consiste el GNV?

El gas natural vehicular es un gas adaptado que se puede utilizar como combustible alternativo y que permite circular a los vehículos.

Se trata de un combustible abundante y de fácil acceso. Tanto el Gas Natural Comprimido (GNC) como el Gas Natural Licuado (GNL) son dos tipos de GNV.

El Gas Natural Comprimido (GNC)

Se utiliza para los transportes de corta distancia. Principalmente en vehículos ligeros y algunos pesados como pueden ser autobuses y camiones de transporte de corta y media distancia.

La gran mayoría de vehículos que se propulsan por GNV utilizan gas natural comprimido (GNC) ya que el volumen que ocupan en el depósito es inferior al GNL.

Gas Natural Licuado (GNL)

Se trata de metano y etano almacenado a alta presión para permitir que se mantenga estable. El volumen de los gases emitidos durante su combustión es menor.

El GNL se utiliza en el transporte pesado, ya que proporciona una mayor autonomía.

Beneficios de utilizar el GNV

El coste económico a la hora de realizar una adquisición es considerablemente menor que uno de gasolina o diésel.

Se reduce la emisión de gases de efecto invernadero y mejora la calidad del aire en las ciudades ya que se consigue reducir las emisiones hasta en un 25%.

El combustible de los coches a GNV es más eficiente

El coste del combustible es menor.

Además de contribuir con la reducción en las emisiones colaborando para conseguir Zero emisiones , el desembolso económico que tenemos que realizar para su adquisición y uso es menor.

Desventajas de utilizar el GNV

A pesar de todas las bondades escritas anteriormente, también encontramos alguna desventaja en el uso del GNV

El gas es inflamable y nocivo y al carecer de olor, es difícil detectarlo a tiempo si se produce algún escape.
Como hemos dicho anteriormente, no es una energía renovable, por lo que es una fuente finita.
Es cierto que no produce CO2, pero si produce otros gases con efecto invernadero.

Diferencias entre el gas natural (GNV) y el gas licuado de petróleo (GLP)

La principal diferencia es que el gas natural (GNV) es que procede de un recurso que se forma en la naturaleza debido a restos orgánicos. Sin embargo, el GLP es el resultado de procesos de destilación de petróleo y tiene entre sus componentes el butano y el propano.

El coste del GLP es inferior al del gas natural.

El GLP se encuentra en estado líquido, mientras el que el gas natural se encuentra en estado gaseoso.

En conclusión: ¿Es el gas natural una buena alternativa a la gasolina y el diésel?

Los vehículos propulsados por gas natural cuentan con el distintivo medioambiental ECO lo que le sitúa en el segundo lugar entre los vehículos más eficientes y les libera de las restricciones existentes en las grandes ciudades.

A pesar de que no produzca emisiones de CO2, no podemos obviar el hecho de que emite otros gases contaminantes y que no es una energía renovable.

Además, en el proceso de extracción, siempre se filtra una parte del gas extraido a la atmósfera provocando un incremento del gas metano contribuyendo al efecto invernadero.

Por tanto, el gas natural es una energía menos contaminante, que tiene un menor impacto en el medioambiente. Seguimos en la búsqueda de energías no contaminantes